LOS ÁNGELES, 20 abr (Reuters) – La espectacular explosión del nuevo cohete Starship de SpaceX minutos después de que se elevó de su plataforma de lanzamiento en un primer vuelo de prueba es el último ejemplo vívido de una fórmula comercial de “fracaso exitoso” que le sirve bien a la compañía de Elon Musk. dijeron los expertos el jueves.
En lugar de ver la ardiente desintegración del colosal sistema Starship de próxima generación de Musk como un revés, los expertos dijeron que la pérdida dramática del cohete ayudaría a acelerar el desarrollo del vehículo.
Las imágenes de la Starship cayendo fuera de control a unas 20 millas en el cielo mientras estaba montada en su propulsor de cohetes Super Heavy antes de que el vehículo combinado explotara en pedazos dominaron la cobertura mediática del muy esperado lanzamiento.
SpaceX reconoció que varios de los 33 potentes motores Raport del Super Heavy fallaron durante el ascenso y que el cohete propulsor y Starship no se separaron como se había diseñado antes de que terminara el desafortunado vuelo.
ero los ejecutivos de SpaceX, incluido Musk, el fundador, director ejecutivo e ingeniero jefe de la compañía de cohetes con sede en California, elogiaron el vuelo de prueba por lograr el objetivo principal de hacer despegar el vehículo y proporcionar una gran cantidad de datos que impulsarán el desarrollo de Starship.
