#EnLaOpinión de Javier Estrada.- En Morelos, enfrentamos dos grandes retos ambientales que ponen en riesgo nuestro bienestar y el de futuras generaciones: el alarmante aumento de incendios forestales y la inminente escasez de agua. Como sociedad, debemos actuar con urgencia y responsabilidad para proteger nuestros recursos naturales.
Incendios Forestales: Una Amenaza Creciente
Según datos de la Comisión Nacional Forestal (Conafor), durante el año 2024, Morelos registró 55 incendios forestales, situándose como el tercer estado con mayor número de siniestros en el país. Estos incendios han afectado más de 300 hectáreas de nuestros valiosos ecosistemas.
Es preocupante que el 90% de estos incendios sean causados por quemas agrícolas fuera de control, según el Centro Estatal de Emergencias y Contingencias Ambientales (CEECA). Esta situación no solo destruye nuestra biodiversidad, sino que agrava la crisis ambiental al deteriorar el suelo y el equilibrio ecológico.
Exhorto a las Autoridades
Es urgente que las autoridades refuercen las acciones de prevención y combate de incendios mediante:
Mayor vigilancia y sanciones más severas para quienes provoquen incendios de manera irresponsable.
Campañas de capacitación para agricultores sobre prácticas agrícolas sostenibles que eviten el uso del fuego.
Fortalecimiento de brigadas forestales y mejor equipamiento para la atención oportuna de incendios.
Responsabilidad Ciudadana: Evitemos los Incendios
La protección de nuestros bosques es tarea de todos.
Hago un llamado a la ciudadanía para:
Evitar realizar quemas sin las medidas adecuadas y los permisos correspondientes.
No arrojar colillas de cigarro, vidrios o basura en áreas forestales.
Reportar cualquier conato de incendio al 911 o a Protección Civil.
Escasez de Agua: Cuidemos el Recurso Más Vital
El estiaje es y con él, la reducción en la disponibilidad de agua. En Morelos, esta crisis es cada vez más evidente, por lo que debemos prepararnos para un uso responsable y eficiente del vital líquido.
Llamado a las Autoridades
Implementar campañas sobre ahorro y uso eficiente del agua.
Modernizar y dar mantenimiento a la infraestructura hidráulica para reducir fugas.
Regular el uso del agua en la industria y la agricultura, promoviendo prácticas sustentables.
